La asociación informó que se produjeron un promedio de tres grandes robo de cargas por día en 2014, apuntando a mercaderías de alto valor y fáciles de robar en la cadena de suministro, con una pérdida media de US$ 221.000 por día. Para todo el año, TAPA registró 1.102 incidentes en Europa, Medio Oriente y África.
El uso de la violencia por parte de las bandas criminales organizadas en 2014 aumentó en un 4,5% respecto al año anterior. Hubo 102 secuestros violentos de camiones, sobre todo en Francia, Italia y Sudáfrica. El top ten de crímenes a las cargas en 2014 implicaron una pérdida combinada de US$ 35 millones. Hubo 15 robos en instalaciones y vehículos en todo el año, con pérdidas superiores a US$ 1 millón.
Los blancos principales de las bandas criminales, según el informe fueron cosméticos, electrónica de consumo, ropa, calzado, tabaco y cigarrillos, productos farmacéuticos, alimentos, bebidas, partes de automóviles, neumáticos y dinero en efectivo. TAPA dijo que hubo 157 incidentes en 2014 que implicaron pérdidas por más de US$ 107.000 en cada uno. Alemania y el Reino Unido registraron el mayor aumento en los incidentes; Alemania registró el mayor número de delitos de mercaderías en 2014, un incremento del 42,5% respecto de 2013, o sea 285 robos de carga.
El Reino Unido, que tuvo 175 incidentes de robo, registró el mayor salto, con un 98,8% más de crímenes de carga que durante 2013. Sin embargo, Holanda, que tuvo su mayor número de delitos en 2013, registró una caída del 9,7% en comparación con 2013, no obstante soportó 258 incidentes. La mayoría de los robos fueron de vehículos, más de 500, lo que representó más del 45% de todos los incidentes en 2014, pero 193 fueron en instalaciones.
El análisis de TAPA reveló que el 92,8% de los 1.102 delitos de carga en la región EMEA en 2014 se llevaron a cabo en 10 países: Alemania, Holanda, Reino Unido, Francia, Italia, Rusia, España, Austria, Suecia y Sudáfrica. Los datos recogidos por TAPA fueron suministrados por sus miembros, los organismos policiales y los medios de comunicación creíbles.
Fuente: Air Cargo World
