El 26 de agosto de 2015 la Cámara de Senadores de la Nación dio la media sanción que faltaba al proyecto de ley de creación de la Aduana de Rafaela y de Venado Tuerto, presentados en 2012 por Omar Perotti, en ese entonces diputado nacional, y la noticia fue recibida con beneplácito por el empresariado de la región que realiza operaciones de comercio exterior. Precisamente, el proyecto se fundamentaba en la necesidad de que las empresas puedan ampliar la inserción de sus productos en los mercados internacionales, por medio de exportaciones, y, como lógica consecuencia de ello, la generación de divisas y la creación de empleo.
La ley se inscribía en el proceso de descentralización aduanera llevada a cabo por el gobierno nacional anterior. Hasta la sanción de la norma, la provincia contaba con oficinas aduaneras en Rosario, San Lorenzo, Villa Constitución y Santa Fe. El Resguardo Aduanero que funciona en el predio del Parque de Actividades Económicas de Rafaela (Paer) depende de la Aduana de la capital provincial.
Antecedentes económicos
Si bien todavía no se conocen datos precisos del comercio con el mundo registrado el año anterior desde la región, las cifras logradas en 2014 hablan por sí solas acerca de la magnitud que alcanzan las operaciones: las 42 empresas que exportan vendieron por casi US$ 477 millones y llegaron a 86 países, según la información elaborada por la Cámara de Comercio Exterior (Cacex) del Centro Comercial e Industrial de Rafaela (Ccirr).
Demás está decir que este importante volumen de operaciones demanda una gran cantidad de trámites y logística por lo que la instalación de la Aduana era aguardada con marcado interés por los exportadores, pero las mismas se vieron frustradas con la llegada de la nueva administración central al modificarse las políticas y prioridades en materia aduanera.
Otras prioridades
La novedad fue comunicada por el secretario de Desarrollo Económico, Innovación y Relaciones Internacionales del municipio, Marcos Corach, quien a comienzos de esta semana y luego de reunirse en Buenos Aires con el subdirector general de Operaciones Aduaneras del Interior, Pierre Chapar, reveló (en el programa “Algo dirán” de Radio Galena) que el gobierno nacional “quiere concentrar la mayor cantidad de gente en la frontera, en los pasos fronterizos, porque saben que la Argentina es un gran exportador de cocaína, y quieren reemplazar a la gente que hoy está con otro personal y con más recursos humanos. Con lo cual, hoy las miradas están puestas en las aduanas hacia el extranjero y no hacia el interior”.
“Esto implica que no se avanzará con la Aduana para Rafaela, al menos, en lo inmediato”, dijo el funcionario sin dejar de mencionar que en la Nación “tienen perfectamente claro que la ley está sancionada, pero no van a modificar el status de la Aduana, porque tienen la mirada y el objetivo en otra parte”.
Sorpresa y preocupación
La marcha atrás en el proyecto causó sorpresa y preocupación en el ámbito empresarial local y se consultó al presidente de la Cacex, Edmundo López, para conocer la sensación del sector exportador.
“Lo recibimos con sorpresa y mucha preocupación porque el trabajo para que haya una Aduana en Rafaela se vino haciendo, junto a las instituciones, desde la creación misma de la Cámara, allá por el año 1978”, sostuvo con decepción el empresario.
López explicó que “la Aduana es un escalón más para luego cerrar el círculo con la aspiración que tenemos, en el mediano plazo, de montar un Centro de Logística Internacional”.
El titular de la Cacex se quejó porque la entidad no fue recibida por las autoridades de Afip y la Dirección General de Aduanas, a pesar de los intentos realizados, y se esperanzó en que “esto sea temporal y vamos a seguir insistiendo para conseguir que nos atiendan y demostrar la conveniencia para la región de este organismos en la ciudad”.
“Rafaela -fundamentó López- exporta anualmente cerca de US$ 500 millones y son todas manufacturas de origen industrial y agropecuario, por lo que estamos hablando de mucho valor agregado. Esto hace que el valor de la tonelada del producto que sale a otros países esté en el orden de los US$ 5.500, una cifra significativa si se la compara con la media a nivel nacional que está alrededor de los US$ 500 a US$ 600”.
En el mismo sentido, apuntó que “esta es una zona que tiene un gran perfil exportador y pretendemos que lo siga siendo y que crezca. Y es por eso que contar con una Aduana no es una cuestión de status sino de necesidad”
Finalmente, volvió a recalcar que entre los beneficios de contar con una Aduana está también todo lo relacionado con la logística que necesitan las empresas para hacer llegar sus productos al mundo al indicar que “es un tema fundamental porque las empresas trabajan para adentro en costos, producción, calidad, pero la logística está fuera de la empresa y para nosotros es un costo importante y queremos mejorarla”.
Fuente: El Litoral