100 años de Revista Marítima, ahora RM-Forwarding. -100 años que transcurrieron en dos siglos diferentes. Dos siglos con improntas muy diferentes en los que las tecnologías, y algunos hombres, hicieron sentir su imperio.
Todos los hombres hemos sido partícipes necesarios en semejante evolución en la que hasta las leyes de la física fueron desafiadas y hasta sometidas. El hombre fue sujeto y objeto de esa evolución y sucumbió bajo sus efectos, o se adecuó a las nuevas circunstancias y relaciones de poder.
Cada uno de nosotros cumplió con su rol sin importar la magnitud de la tarea. Los medios de comunicación hicieron lo propio tanto fuera en áreas masivas como especializadas, pero siempre actuando como “sensores” inteligentes de los cambios. Nos queda la certeza de haber cumplido con los objetivos.
Una crónica necesaria
1923, año en el que nació la Revista Marítima
En este año se sanciona la ley que extiende los beneficios de la jubilación a los empleados del comercio y la industria, a los periodistas y los gráficos. Además, se promulgaron: la ley que combate a los trusts, la que controla el comercio de carnes y la que obliga a pagar salarios en moneda nacional, para evitar los vales tan comunes en el interior.
Este mismo año se inaugura el Museo de Luján y, en Buenos Aires, es intendente Carlos Noel.
Entre sus obras figura la finalización del paseo de la Costanera Sur, la construcción de hornos para la incineración de basura y la compra de la finca de Lezica para hacer el parque Rivadavia.
Ese verano los porteños sufrieron con temperaturas superiores a los 40 grados.
El país se conmovió con dos hechos. Uno, el asesinato del coronel Héctor Varela, (conocido como el fusilador de la Patagonia por ser el responsable de la represión de obreros), a manos de un anarquista alemán, Kurt Wilkens, quien, a su vez, es muerto en la cárcel por Pérez Millán Temperley, militante de organizaciones de derecha. Al poco tiempo éste también es asesinado.
Hay otro acontecimiento, deportivo, que pone en vilo al país entero. Se trata de la pelea entre Angel Firpo y el invicto norteamericano Jack Dempsey. Firpo, el “Toro Salvaje de las Pampas”, enfrenta a su rival en el Polo Ground de Nueva York ante 85.000 espectadores el 14 de septiembre. Aunque logra expulsar del ring a Dempsey mediante un tremendo uppercut, finalmente el jurado, luego le da por ganada la pelea al estadounidense. Millones de argentinos siguieron la pelea a través de las señales luminosas que se emitían desde el Pasaje Barolo y pocas veces el sentimiento antinorteamericano llegó tan alto como cuando la gente se enteró del fallo.
En 1923 hubo varias hazañas deportivas. Lilian Harrison estableció un récord mundial de natación. Pedro Candiotti, el “Tiburón de Quillá”, logró permanecer en las aguas del río Paraná durante 26 horas.
Enrique Tiraboschi cruzó a nado el Canal de la Mancha y Juan Garramendy atravesó el Río de la Plata en 24 horas y 19 minutos. River inauguró su estadio en un barrio muy lejano al de sus orígenes: Alvear y Tagle.
Una voz femenina aparece en el escenario teatral: Azucena Maizani debuta en el teatro Nacional cantando Padre Nuestro en el sainete de Alberto Vaccarezza. Carlos Gardel y José Razzano parten hacia Europa.
Llega al país el filósofo español José Ortega y Gasset y entre sus admiradores se destaca Victoria Ocampo. En Liverpool, muere el ex canciller y escritor Estanislao Zeballos y en Buenos Aires, Joaquín V. González.
Es un año abundante en nuevos libros que tienen rápido eco en el público: Fervor de Buenos Aires, de Jorge Luis Borges; El grillo, de Conrado Nalé Roxlo; La que no perdonó, de Hugo Wast e Historia de arrabal, de Manuel Gálvez. Ricardo Rojas recibe el Gran Premio Nacional de literatura por su Historia de la literatura argentina.
La Copa Campeonato fue el 38º campeonato de la 1ª División Amateur, organizado por la Asociación Argentina de Football. Se disputó entre el 11 de marzo de 1923 y el 27 de abril de 1924. En el torneo se incluyeron 23 equipos y su ganador fue Boca Juniors, que sumó 51 puntos e igualó al Club Atlético Huracán, al que derrotó en la definición entre ambos.
Un cambio de época
En cada uno de nosotros transcurre, en mayor o menor medida, la percepción de que algunas cosas están cambiando.
Son hechos a los que le podemos adjudicar diferentes proyecciones, y hasta discutir su esencia, pero no podemos discutir su ocurrencia.
Fuimos y somos protagonistas de ese cambio. Pero es cierto que es de difícil percepción, precisamente porque estamos involucrados en éste y son nuestras conductas las que resultan obligadas a adaptarse, a veces violentamente.
Entre aquel 1923 y este 2023 Revista Marítima reflejó muchas innovaciones que nos dan certeza respecto del cambio de época. Alguien podría decirnos, con todo derecho, que sólo fuimos espectadores y no sus ejecutores
Allí estuvimos, eso es lo que vale.
Nacimos para informar el arribo de los buques de pasajeros, de su correo y de sus cargas y, durante décadas, fuimos la publicación de referencia de todo el sector naviero y sus agencias y, hay que decirlo, el negocio naviero también cambió como cambiaron los buques, y el puerto de Buenos Aires, y los negocios del país con el exterior y sus comunicaciones y todas las tecnologías asociadas al transporte marítimo y al manipuleo de las cargas.
Hemos estado allí, dimos cuenta de esos cambios de la manera más transparente y adecuada posible. ¿A qué otra cosa puede aspirar un medio gráfico que no sea dar testimonio de los innumerables cambios registrados?
Y los cambios de los que hablamos no se originaron por sí mismos, sino que fueron el resultado de otros, y éstos a su vez de otros, y de otros…
¿Era otro nuestro país en 1923, hace 100 años? Ya nos hemos referido a esto en una breve reseña, apenas un paneo de los acontecimientos que por aquellos años conmovían a la sociedad argentina y a la sociedad mundial.
La libertad y las democracias mundiales, con todas sus variantes y apreciaciones de minusvalía, expresan hoy por hoy la voluntad de alrededor de 8.000 millones de seres humanos, aunque todavía falte mucho para que ese sueño cristalice en realidades más concretas.
Hemos aprendido, como sujetos activos de una sociedad mundial que muta en forma perceptible y permanente, que debemos adaptarnos a las circunstancias sin perder de vista el objetivo principal: brindar información útil para los hombres y mujeres que se desempeñan en la actividad de la logística del comercio internacional.
RM Forwarding es la continuidad de Revista Marítima soportada en una plataforma tecnológica que nos permite estar día tras día en la pantalla de su monitor, o en la de sus dispositivos móviles, brindándole información y comunicación inmediata para la mejor operación de sus negocios.
Estamos frente a un cambio de época, y por lo tanto de paradigmas. Este es un desafío que no vamos a obviar puesto que esquivar obstáculos no está en nuestra naturaleza.
Hasta la próxima