Miércoles 12 de Noviembre de 2025

¿La Unidad Latinoamericana?

14/6/2013

Colombia busca un acuerdo de cooperación con la OTAN. Brasil condiciona a la Argentina. Uruguay y la Argentina tienen problemas. Costa Rica y Colombia protestan contra Nicaragua. Chile tiene conflictos bilaterales con Bolivia y Perú.

Colombia hace un anuncio en el que dice buscar un acuerdo de cooperación con la OTAN, lo que complica sus relaciones con los demás gobiernos de la región, pero tiene costas en el Pacífico y el Mar Caribe, no en el Atlántico Norte. Los porqués de esto se pueden ver en las siguientes declaraciones.
Vicente Torrijos, profesor y politólogo colombiano de la Universidad del Rosario de Bogotá dijo, “La OTAN es un modelo social y económico afín al de la democracia liberal colombiana, y representa una manera de estar a salvo de las aventuras militaristas en la región”, agregó también que “La ventaja de un acuerdo con la OTAN sería la de darle “mayor legitimidad” a las acciones que se emprendan”. Viendo en la actualidad a Europa y Estados Unidos, principales socios de la OTAN, el modelo social y económico parece no funcionar de la mejor manera, ya que se encuentran muy débiles económica y socialmente.
El diario El Tiempo de Bogotá cierra una nota sobre este tema con la frase “Colombia no puede, en ningún momento y bajo ninguna circunstancia, renunciar a iniciativas orientadas en la senda correcta por no molestar a los vecinos, así a veces cunda la paranoia”. Suena a que “el último que cierre la puerta”, yo me corto solo.
Por su parte, el presidente de Chile  se apoltrona, en broma y para la foto, en el sillón del escritorio de Obama, y este elogia la relación existente con Chile y también el modelo económico impulsado por la Alianza del Pacífico, de la que forma parte Chile junto con México, Perú y Colombia.
Obama dijo “Chile “es un líder” en el continente y en el mundo, y la relación bilateral es hoy “extraordinariamente fuerte”.
Ahora Estados Unidos, a través de su vicepresidente, también pide a Brasil que abra más su economía para estar a la par de las tendencias mundiales del libre comercio, y agrega que “gran parte del futuro de la relación con Estados Unidos dependerá de si Brasil, cuya economía sigue relativamente protegida por las altas tarifas y otras barreras, puede facilitar el comercio”. Parece que ejercer presión o chantajear es lo que sirve.
El presidente de China y el vicepresidente de Estados Unidos confluyen, con pocos días de diferencia, en Trinidad y Tobago, que es lo mismo que decir que van tras el gas y el petróleo, otro futuro conflicto, esta vez entre Venezuela y Trinidad Tobago.
Los chinos quieren hacer el canal de Nicaragua, que le quitaría el dominio a Estados Unidos de una importante ruta marítima, y se calienta la región con Costa Rica y Colombia protestando contra Nicaragua por reclamos territoriales.
¿Quién gana con todo esto? ¿Latinoamérica? No lo creo.

 Algo de la unidad latinoamericana
Cuando en 1982, por el tema Malvinas, nuestro país recurrió al TIAR (Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca), los países miembros que no estuvieron de acuerdo con este pedido fueron, Estados Unidos, Chile y Colombia. Años después gran parte de los firmantes del Tratado se retiraron del mismo al quedar demostrado la inutilidad del mismo.
La Unasur es un organismo que tiene como objetivos construir una identidad y ciudadanía suramericanas. Colombia y Chile también forman parte de este bloque.
Por otra parte, pese a no ser miembros permanentes, Chile y Colombia también son países asociados al Mercosur en mérito a sus intercambios regionales, y el Mercosur representa más del 80% del PBI latinoamericano.
Brasil, socio fundador del Mercosur devaluó su moneda en enero 1998 y precipitó la crisis en Argentina, una recesión que duró tres años y terminó en el colapso del 2001.
Resumiendo, Brasil condiciona a la Argentina; Uruguay y la Argentina tienen problemas por el dragado de sus canales fluviales (Martín García), por la competencia de sus puertos (Buenos Aires – Montevideo) y por las cargas que bajan de Paraguay; continúan veladamente las disputas entre Venezuela y Paraguay, etc.

La Alianza del Pacífico, se muestra al mundo como una alternativa al Mercosur, pero se trata, en realidad, de naciones con incontables conflictos bilaterales. Son bien conocidos los  problemas de Chile con Perú y con Bolivia por límites territoriales y marítimos (el embajador chileno en los EEUU. sostuvo que “Chile no cederá un metro de territorio ante Bolivia”). Por otra parte, la élite política de Perú hace frente común por la disputa marítima que mantiene ese país con Chile ante la próxima definición de la Corte de La Haya.
Colombia y Chile se disputan el apoyo constante de Estados Unidos, y México hace la suya teniendo a su principal proveedor y cliente al lado.
Los países de La Alianza del Pacífico optaron por una política de firma de Tratados de Libre Comercio bilaterales con las naciones desarrolladas, asumiendo de esta forma compromisos institucionales que tienden a achicar el margen de maniobra de sus gobiernos, mientras que los países del Mercosur se inclinaron por un modelo de mayor integración entre ellos, lo que permite maniobrar más libremente a sus gobiernos pero molesta en demasía a los países desarrollados.

Hay errores, además de las miserias propias y ajenas, pero también existe voluntad para sobrellevarlas. Lo que no debe haber es desunión y bajezas, ni permitir injerencias de quienes hoy miran crecer a Latinoamérica y la ven como futuro botín a adquirir o dominar nuevamente.

 

Luis Fernández