La Comisión Europea está analizando si el nuevo sistema de licencias para las importaciones (SIMI) anunciado por Argentina, el llamado SIMI, es suficiente y se ajusta a las normas de la Organización Mundial del Comercio después de que un panel del organismo internacional fallase en contra del sistema de Declaración Jurada Anticipada de Importaciones, denunciado por la UE, EE.UU. y Japón, por entender que restringía las importaciones.
Aunque «el nuevo sistema de licencias parece no ser automático en relación con la importación de un determinado número de productos», la Comisaria de Comercio, Cecilia Malmström, ha dejado claro que «la Comisión espera la plena aplicación de las resoluciones por parte de la Argentina y está analizando minuciosamente las nuevas medidas para determinar si son suficientes para que este país se ajuste plenamente a las normas de la OMC».
Malmström ha recordado que «el plazo razonable para la aplicación de las resoluciones del grupo especial y del Órgano de Apelación concluyó el 31 de diciembre de 2015» y ha explicado que «el Gobierno argentino ha alegado que ha suspendido los requisitos que limitan el comercio, que ha derogado el procedimiento de Declaración Jurada Anticipada de Importación, y que ha adoptado resoluciones que establecen nuevos sistemas de seguimiento de importaciones y licencias de importación».
«El nuevo Sistema Integrado de Monitoreo de Importaciones (SIMI), en cuyos detalles aún está trabajando el Gobierno argentino, está destinado supuestamente a facilitar el intercambio de información y el seguimiento del proceso de importación, desde su inicio hasta el despacho de aduana», ha explicado Malmström, en respuesta a una pregunta parlamentaria del eurodiputado del PP Pablo Zalba.
La Comisaria ha reconocido «gran satisfacción» por «el compromiso del nuevo Gobierno» de Mauricio Macri con «una política comercial más abierta y el cumplimiento de las obligaciones internacionales de la Argentina», y ha dicho que la Comisión «está deseosa de trabajar con él para la consecución de estos objetivos».
«La Comisión es favorable a un diálogo regular sobre asuntos comerciales con la Argentina para garantizar que las políticas comerciales de este país sean conformes con las normas de la OMC y no representen un obstáculo indebido para los exportadores de la UE», finalizó Malmström.
Zalba instó a la Comisión Europea a aclarar si iba a «adoptar algún tipo de medidas» para evitar que la Argentina siguiera restringiendo las importaciones europeas a través del sistema de declaración jurada anticipada de importación que el Órgano de Solución de Diferencias de la OMC, que resolvió la disputa, consideró «incompatible» con sus normas al tener «un efecto limitador de las importaciones y, por tanto, constituye una restricción a la importación». También inquirió si se habían iniciado conversaciones con el Gobierno argentino para resolver la disputa.
Fuente: Europa Press
