Como consecuencia del freno de la economía la actividad del sector del transporte carretero de cargas se derrumbó alrededor del 20 al 25% en los primeros meses del año, señaló Daniel Indart, presidente de Fadeeac, durante el congreso en Rosario.
Fadeeac es la entidad que agrupa a las cámaras representantes de los transportistas de carga, son los propietarios de los camiones y la contraparte de otra entidad quizás más mediática, el sindicato de choferes que conduce Hugo Moyano.
Aun en su condición de entidad patronal, el sector se presenta a sí mismo como un negocio de pymes que operan en un mercado atomizado. Según Indart, el 84% de las empresas camioneras son familiares, y el 92% de estas cuenta con entre uno y cinco camiones.
Indart hizo hincapié en la inflación, comentando que socava la rentabilidad de las empresas del sector mediante el alza de los precios de los combustibles y los costos salariales, aseguró que “El esfuerzo es más duro que en otras actividades”. “Nosotros no podemos fijar el precio de nuestros insumos, desde el año pasado venimos perdiendo rentabilidad y el cambio de política económica nos afectó”.
Alfredo Guagliano, presidente de la Asociación de Transportistas de Carga de Rosario (ATCR) coincidió y dijo, “El 70% de nuestros costos son salarios y combustibles, y en este último ni siquiera tenemos posibilidad de negociación”.
ATCR fue la entidad anfitriona del congreso federal de Fadeeac que, en esta periódica convocatoria, analiza la coyuntura del sector y los planes a largo plazo. En esta edición, la preocupación por la caída de la rentabilidad, las paritarias que empezarán el mes próximo y el rechazo a la autorización para el tránsito de bitrenes fueron los temas que dominaron la agenda de la reunión.
Revisaron además el ritmo de las tareas en la Universidad del Transporte que se está construyendo en Escobar. Este proyecto se está llevando a cabo en un terreno de treinta hectáreas, donde habrá simuladores, pistas de manejo y playas de maniobra para la capacitación de choferes.
“El transporte de cargas por carretera es parte de la cadena de producción y distribución pero también asumimos como tarea de responsabilidad social empresaria el trabajo en seguridad vial”, señaló Indart. Continuó diciendo que, “La gente tiene la imagen de que el camión molesta, pero si no estuviera el camión, la leche, los chips, etcétera, no podrían trasladarse”.
La nueva sede de ATCR, que se inauguró en Bvd. Seguí y Pueyrredón posee 1.200 metros cubiertos, y contiene seis aulas de capacitación y un auditorio. Guagliano, titular de la entidad, destacó la intención de hacer de ese espacio en un centro de actividades y negocios. “Queremos que vengan los proveedores a ofrecernos lo suyo, los capacitadores, que el transportista se encuentre aquí como en su casa”, enfatizó.