Martes 11 de Noviembre de 2025

Comercio mundial: cambios que impactan en la región

27/7/2015

La desaceleración de la demanda de China y los límites del multilateralismo. China retrae sus compras y las concentra en materias primas a precios deprimidos. El impacto en Argentina.

comercio mundialEl comercio mundial experimenta un reacomodamiento que empieza a mostrar con dureza sus coletazos sobre los países proveedores de materias primas como la Argentina, cuyos sectores productivos manifiestan cada vez más las señales que amenazan toda la estructura de la cadena de valor. Los números globales del comercio mundial muestran un dato revelador: las exportaciones de China se recuperaron en junio, pero las importaciones volvieron a descender, en un contexto de fragilidad de la demanda internacional que hizo caer un 7% su comercio exterior en el primer semestre del año.
La contracción de la economía del gigante asiático —líder del comercio mundial en intercambio de bienes manufacturados— reacomoda todo el escenario internacional y provoca, puntualmente en el caso de las materias primas, un desplome generalizado que la propia China, a su vez, aprovecha para stockearse a precios bajos.
En las últimas semanas se conoció que China, el mayor comprador de soja del mundo, importó 8,09 millones de toneladas de soja en el mes de junio, su segundo nivel mensual más alto luego de que los procesadores aumentaran las importaciones para aprovechar los suministros suramericanos baratos.
Las importaciones de junio, las más altas de este año, saltaron un 26,6% frente al mismo mes del año previo, y hasta un 32% a partir de mayo, según datos de su Administración General de Aduanas.
La explosión de conflictos domésticos como los que experimentan por estas horas sectores como la lechería, el acero, o producciones de economías regionales como las de frutas de la zona cuyana y el Valle de Río Negro, entre otras, en buena parte tienen su origen en la caída de los precios internacionales de sus producciones y en la retracción de la demanda externa, en medio de un escenario convulsionado.
Justamente este reacomodamiento en el mapa del intercambio, llevó a muchos comercio mundialespecialistas como el ex presidente del BID, Enrique Iglesias, a alertar sobre “la crisis del multilateralismo”, a merced de la “fragmentación derivada de los mega acuerdos de libre comercio de los países industrializados”. El economista, un férreo promotor de esta estrategia, ahora abogó por la integración regional como “una de las puertas” hacia el cambio productivo.
“El multilateralismo está en seria crisis” y que el futuro prevé “un mundo fragmentado con mega tratados impulsados por los países poderosos” dijo, y arengó a los países emergentes a “ayudarse a navegar en este mundo cambiante que tenemos ante nosotros”.
La estrategia de la potencia asiática de aprovechar la caída de precios para sumar importaciones se consolidó en las últimas semanas. Las cotizaciones cercanas a los mínimos en varios años podrían apuntalar algunas importaciones chinas de materias primas en los próximos meses, dando un impulso a los envíos de petróleo crudo, el mineral de hierro y la soja, aunque la débil demanda doméstica limitaría las adquisiciones de otros productos.
Las importaciones chinas de petróleo crudo subieron 27% en junio respecto del mismo mes del 2014, al segundo nivel más alto en los registros. Las compras de soja tuvieron un salto similar. “Dados los precios de las materias primas muy bajos, creo que habrá algo de demanda de reabastecimiento y eso apoyará la importación de materias primas”, dijo Helen Lau, analista de Argonaut Securities en Hong Kong.
Pero los precios débiles hicieron poco para alentar las adquisiciones de otras materias primas en junio, pues el carbón se desplomó 34%, al tiempo que el mineral de hierro y el cobre básicamente, estuvieron planos dado que una economía floja afectó la demanda.
Las autoridades chinas están desesperadas por resucitar la confianza económica luego del hundimiento de la bolsa en las últimas semanas, pero el crecimiento de la demanda industrial sigue relativamente débil y hay pocas señales de que la segunda mayor economía del mundo esté por reanudar una ola de compras. “No habrá mucha mejora porque la demanda doméstica sigue baja y los inventarios están altos”, dijo Zhang Xiaojin, analista de Everbright Futures.
Bienes de capital
Pero en esta convulsión y en medio de un proceso de revalorización del dólar frente a otros commodities —oro, petróleo o granos— también en la región comenzó a mostrar sus efectos sobre los bienes de capital que exporta la Argentina. El sector de la maquinaria agrícola, que ya viene desacelerando desde el año pasado, siguió perdiendo mercados en el comercio mundial.
Según un informe privado Venezuela dejó de comprar, y en lo que va del año sólo se exportaron 20 tractores a Chile y Angola, por un total 809.245 dólares, por la caída de la demanda de esa plaza, cuando en 2014 se habían vendido al exterior 136 unidades.
Un trabajo de Investigaciones Económicas Sectoriales (IES) sostiene que los fabricantes de maquinaria agrícola trabajan al 60% de su capacidad y, pese a un leve repunte de las ventas locales, la crisis es aguda con un mercado interno impactado por la baja rentabilidad y exportaciones un 40% más bajas que en 2014.
En ese marco, el gobierno confirmó que continuará con las medidas de control del comercio exterior. El secretario de Comercio, Augusto Costa, aseguró que las Declaraciones Juradas Anticipadas de Importación (DJAI) seguirán hasta el 31 de diciembre próximo, aunque aclaró que el próximo gobierno podría “decidir voluntariamente eliminarlas”.
Fuente: http://www.lacapital.com.ar/