Jueves 15 de Mayo de 2025

Importaciones de bienes de consumo en alza

3/5/2016

Las importaciones de ciertos productos se atribuyen al efecto Brasil, otras a evitar remarcaciones. Quien padece las consecuencias es la industria nacional

importacionesLas importaciones, vistas por distintos medios de nuestro país muestran un -por ahora- desalentador pronóstico. Se esperan cambios para el segundo semestre, pero muchos no creen que estos vayan a ser suficientes.

Electrodomésticos, la importación de un trimestre fue mayor que en todo el año 2015
La recesión por la que atraviesa Brasil, que hundió su consumo local y provocó un sobre stock de mercadería, no sólo derrumbó la producción argentina sino que ya sufre el efecto rebote tan temido por los industriales. Los informes privados coincidieron en una caída sin fondo de la actividad industrial local, principalmente arrastrados por la crisis brasileña, aunque la alerta está en el futuro: contados casos son los que prevén un escenario positivo para los próximos seis meses, lo que alargó el período de retracción, considerado de manera inicial para el primer semestre del año.
En este contexto, una avalancha de importaciones de productos de línea blanca llenó las ofertas y puso en situación de extrema delicadeza a las fábricas locales que producen freezers, heladeras y exhibidores, con epicentro en Santa Fe. O el inquietante ingreso de pollo trozado que divisó el sector avícola, en donde se señala que sólo en marzo ingresó al país más productos de carne blanca que en todo el año pasado.
El descenso de la competitividad tiene varios factores que ponen en desventaja a las empresas argentinas: a los históricos costos logísticos, presión impositiva y falta de financiamiento barato, se sumó ahora el dumping que denuncian de parte de las firmas brasileña, que aún en medio de un ajuste económico reciben subsidios a través del BNDES.
“Existe una sobreoferta que, si no existe una postura muy firme de parte del Gobierno, puede inundar el mercado argentino, y así dejar sin operaciones a las pymes, que son las principales dadoras de empleo”, advirtió un empresario del interior.
Para respaldar el mal momento por el que atraviesa la industria, CAME difundió un informe en donde señala que “la producción de las PYMES industriales volvió a caer en marzo” aunque destacó que “se incrementó levemente el porcentaje de empresas con aumentos interanuales”, que pasó del 18% en febrero al 21,6% en marzo.
Fuente: Diario BAE

Mayores importaciones de bienes de consumo pero menores de maquinarias para industrias importaciones
En el trimestre, las importaciones de maquinarias para nuevas inversiones bajaron un 12% y las de comidas y bebidas se incrementaron el 19%.
Sin señales de reacción de las importaciones vinculadas a la industria y la inversión, las que empiezan a reactivarse son las de bienes terminados y de consumo. Computadoras, textiles y celulares encabezan los bienes que más crecieron, junto con alimentos y bebidas, en algunos casos por consumo reprimido y en otros para generar competencia y precios de referencia, según reconocen en el Gobierno.
“Se volvieron a conseguir los Tramontina”, contó entusiasmado un empresario sobre la reaparición en las góndolas de los cuchillos “made in Brasil” que llegaron a tener faltantes en los últimos años.
Las cifras del Intercambio Comercial Argentino que publica el Indec dan cuenta de que en marzo, el ingreso (las importaciones) de bienes de consumo importados creció 11% y 6% en el primer trimestre mientras que el resto de los rubros -salvo la importación de autos- muestra caídas.
Así, las importaciones vinculadas a la producción, como las de bienes de capital, bajaron 16% en marzo y 1% en el trimestre y las de insumos cayeron 11% en el último mes (y 12% en el trimestre).
Dentro de los bienes de consumo, el ingreso de alimentos y bebidas creció 28% en marzo. De acuerdo con fuentes del sector, el Gobierno y los supermercados negociaron una mayor apertura en alimentos importados a cambio de evitar remarcaciones en los bienes de la canasta básica.
http://www.perfil.com

importacionesExportación de frutas y hortalizas continúa en baja
El primer trimestre de este año ha sido crítico para muchos productores primarios. Los quinteros que producen frutas, verduras y hortalizas no son la excepción. Las medias del gobierno (quita de retenciones, devaluación) no surtieron el efecto esperado y la pérdida de rentabilidad complica cada vez más a los pequeños y medianos productores.
La consultora IES (Investigaciones Económicas Sectoriales) publicó hace unos días un informe bimestral que arroja los datos sobre la exportación y niveles de producción de frutas y hortalizas, en el que determinan que el panorama no es favorable. Y es que la exportación de estos productos tuvo una baja de 1,5% respecto del 2015 alcanzando solo los US$ 169,4 millones. En cambio, el volumen despachado subió casi un 6%.
En relación a la producción frutícola, se estima que caería más de un 7%. El volumen de producción de las principales frutas (peras, manzanas, limones, naranja, mandarina y pomelos) alcanzaría solo las 4,4 millones de toneladas.
Por su parte, el limón será la única fruta que tendrá un crecimiento este año. Al respecto, Walter Ojeda, gerente comercial de la empresa San Miguel, miembro de All Lemon, dijo a los medios: “2016 será otro año favorable para el limón. Si bien no es fácil predecir un volumen de producción final en toneladas, se puede estimar que el número de frutas por árbol será mayor de lo habitual”.
Una de las mayores problemáticas para el sector frutícola es la baja rentabilidad -que en muchos casos llega a tener pérdidas- que se ve reflejada, por ejemplo, en la combinación de una baja en los ingresos por exportación del 1,5% y un alta del 5,9% en el volumen de mercadería despachada.  Los principales destinos de la mercadería de exportación fueron Brasil y Estados Unidos, mercados en los que las ventas cayeron un 31,7% y un 0,7% respectivamente.
Esta pérdida de rentabilidad también se ve reflejada en malas temporadas, con toneladas de frutas que si quiera llegan a ser cosechadas o embaladas. Es el caso del cordón frutihortícola del partido de General Pueyrredón de Buenos Aires quienes en la última temporada se vieron forzados a tirar 100 toneladas de tomate por los bajos costos de mercado.
“Este año se tiró tomate por primera vez en la historia porque era tan bajo el costo que era imposible embalarlo. Para poder entregarlo necesita estar embalado. Pero el costo estaba entre 6 y 7 pesos embalado y no se obtenía ni un peso de ganancia por cajón. Productores que lo enviaron al mercado central perdieron plata. Una carga de 1.500 cajones perdió hasta $ 30.000, porque a la gente que trabaja en el campo hay que pagarle igual. Las pérdidas fueron muy graves”, expresó Ricardo Velimirovich, presidente de la Asociación Frutihortícola de Productores y Afines de General Pueyrredón.
Así, productores de todo el país siguen a la espera de una reactivación del sector que les permita sostenerse en la actividad.
Fuente: Revista Internos