Martes 10 de december de 2024

Transporte marítimo en América Latina y el Caribe entre crisis

25/10/2024

El Informe de la UNCTAD muestra que el transporte marítimo en América Latina y el Caribe se debate entre crisis geopolíticas y climáticas

el transporte maritimoEl transporte marítimo entre América Latina y el Caribe se debate entre crisis geopolíticas y climáticas. -Es necesario invertir en infraestructuras portuarias, desarrollo de capacidades y resiliencia climática para hacer frente a los retos relacionados con las interrupciones de la cadena de suministro y la conectividad marítima.

El Informe del Transporte Marítimo 2024 de ONU Comercio y Desarrollo (UNCTAD) revela los graves retos a los que se enfrenta el sector marítimo en América Latina y el Caribe. Las perturbaciones climáticas, las crisis geopolíticas comerciales han afectado significativamente a la región, con interrupciones en el Canal de Panamá que sirven como un claro ejemplo de los problemas más amplios.

Las perturbaciones climáticas afectan al comercio
La grave sequía de 2023 y principios de 2024 redujo el nivel de agua del Canal de Panamá, obligando a los barcos a tomar rutas más largas y costosas. Esto afectó especialmente al comercio entre América y Asia.

El cambio provocó un aumento del 31% en las distancias de navegación y una reducción de los volúmenes de carga, dejando al descubierto la vulnerabilidad del Canal de Panamá como ruta marítima vital. Aunque la mejora de la gestión del agua ayudó a mediados de 2024, los tránsitos siguieron disminuyendo en torno a un 20% en comparación con 2023. El informe de la UNCTAD pone de relieve la acuciante necesidad de infraestructuras portuarias resistentes al cambio climático en toda la región.

Fluctuaciones de los fletes y cambios en el comercio
Las tarifas de flete en toda la región fluctuaron a lo largo de 2023. Las tarifas en las rutas de Europa a Sudamérica cayeron un 36%, mientras que las rutas de África a Sudamérica experimentaron un aumento del 20%. Esta volatilidad se ha visto impulsada por los cambios geopolíticos, como la decisión de Egipto de abastecerse de grano en Brasil y Estados Unidos en lugar de Ucrania.

Los Pequeños Estados Insulares en Desarrollo (PEID) se enfrentan a retos adicionales, con un descenso del 9% en la conectividad marítima durante la última década, lo que se traduce en mayores costos y menor competitividad. Aunque Trinidad y Tobago es un centro neurálgico, los puertos más pequeños se enfrentan a ineficiencias que aumentan aún más los costes. Si no se toman medidas, estas deficiencias de conectividad agravarán las desigualdades comerciales.

Los puertos del Caribe bajo presión
Los puertos del Caribe se enfrentan a crecientes retos operativos. Las tasas de manipulación portuaria son entre dos y tres veces más elevadas que en puertos similares de todo el mundo, lo que se ve agravado por problemas relativos a procesos, gestión e infraestructuras. La competencia entre cruceros y buques de carga aumenta la tensión, limitando aún más la eficiencia del comercio.

Para los PEID, cuyas economías dependen en gran medida del transporte marítimo, estas ineficiencias suponen un grave problema de desarrollo. El desequilibrio en los flujos comerciales, en los que los buques entrantes llegan completamente cargados y salen vacíos, agrava el problema, disparando los costes y reduciendo la viabilidad de los servicios marítimos.

Urge actuar
En el Foro Mundial de la Cadena de Suministro de la UNCTAD (Global Supply Chain Forum), celebrado en mayo de 2024 en Barbados, las partes interesadas debatieron la crisis de conectividad de la región, señalando como problemas clave la ineficacia de los procesos aduaneros, la falta de infraestructuras y la escasa competencia. Las recomendaciones del foro se centraron en consolidar los volúmenes de carga, fomentar la colaboración entre cargadores e impulsar las infraestructuras portuarias a través de la inversión privada.

El foro también hizo hincapié en la necesidad de adaptación al clima y la creación de resiliencia, en particular para los puertos vulnerables a fenómenos meteorológicos extremos. Para salvaguardar el futuro del sector marítimo de la región, es fundamental aumentar la financiación y la capacitación de estas iniciativas.

El Informe del Transporte Marítimo 2024 de la UNCTAD pide reformas urgentes para hacer frente a estos desafíos. Una estrategia a largo plazo, centrada en la resiliencia climática, la eficiencia portuaria y el acceso justo a los servicios marítimos, es esencial para garantizar el desarrollo sostenible en la región de América Latina y el Caribe. Si no se toman medidas, el sector marítimo de la región corre el riesgo de sufrir más tensiones, lo que socavaría el comercio y el crecimiento económico.