Consideraciones para el bunkering de GNL. -Se ha dado una gran cobertura al debate en el mundo marítimo con respecto al contenido de azufre en el combustible y la reducción de las emisiones de CO2.
Una solución es el GNL como combustible, pero ¿cuáles son las implicaciones para la infraestructura costera?
El GNL creció en popularidad como combustible para los buques, especialmente para su uso dentro del creciente número de áreas de control de emisiones (ECA).
Como resultado, las autoridades portuarias y los operadores de terminales, especialmente en toda Europa, se enfrentan a un problema sobre qué método de abastecimiento de GNL se debe elegir para ofrecer a los buques.
Este problema se extiende más allá de aquellos puertos que están obligados a proporcionar dichos servicios, de acuerdo con las regulaciones europeas sobre la accesibilidad pura de combustibles alternativos.
De hecho, algunos puertos pueden considerar la construcción de instalaciones de abastecimiento para atraer buques propulsados con GNL, así como sus mercaderías y cargas.
Al evaluar los métodos de implementación se puede ver que hay en la actualidad cuatro métodos para el bunkering de GNL:
– Contenedor tanque de GNL a buque
– Camión de GNL a buque
– Tanque de almacenamiento de GNL a buque
– Buque abastecedor de GNL a buque
Todos estos tienen puntos fuertes y débiles, particularmente en relación con el tiempo consumido y el costo de la infraestructura necesaria.
En los casos de los métodos de camión a buque y el uso de un contenedor tanque de GNL, para ambos se requiere una menor inversión en infraestructura pero la transferencia del combustible es lenta.
Es posible aumentar la tasa de transferencia conectando más contenedores tanques a un concentrador instalado en el muelle, pero eso requiere un mayor espacio para maniobrar el camión y una zona de seguridad más amplia.
Por su parte, el uso de contenedores tanque de GNL puede ser efectivo (se puede cargar con grúa o rodar), pero solo para buques donde el combustible se desplaza desde los contenedores cisterna en lugar de los tanques de a bordo.
Ambos métodos ocupan mucho espacio en los muelles y requieren procedimientos de seguridad que pueden ser imposibles en el contexto del entorno físico y de la carga u otros requisitos operativos.
La planificación de una terminal de GNL a pequeña escala requiere la construcción de un tanque de almacenamiento y una infraestructura de transferencia. El tanque de almacenamiento puede ubicarse a una cierta distancia del muelle, lo que puede ser beneficioso para la seguridad, ya que separa la infraestructura de GNL y el buque de las operaciones de carga.
Además, este método se puede utilizar en puertos donde la construcción del muelle es liviana y no soportaría el peso de tanques pesados. Dependiendo del tamaño (volumen de GNL) de tal terminal, hay posibilidades de que la operación sea manejada por pocas personas o incluso completamente automatizada, dejando a la tripulación del barco responsable de las operaciones de abastecimiento de combustible, supervisada de forma remota por el proveedor.
El método más flexible, pero más costoso, de bunkering de GNL es desplegar un buque o barcaza abastecedora. 
Este método, aparte de los costos de capital y operativos, solo tiene aspectos positivos. Esta modalidad de buque a buque evita las construcciones en muelles y las limitaciones de espacio. Tampoco impide las operaciones de carga porque las operaciones de abastecimiento de combustible y la zona de seguridad se encuentran en el lado del mar.
También tiene una mayor flexibilidad, ya que el buque o barcaza abastecedora puede atender a todos los muelles en un puerto.
El suministro de combustible a las barcazas se puede realizar a través de otras instalaciones, sin afectar directamente a las operaciones de carga del puerto.
Consideraciones clave
Las autoridades portuarias y los operadores de terminales deben tener en cuenta los siguientes problemas al decidir el método de bunkering de GNL:
– Tipo de buques, frecuencias de carga, volumen de GNL por barco, tiempo disponible para carga, etc.
– Disponibilidad en muelles: cargas permisibles, infraestructuras portuarias y procedimientos de seguridad
adecuados.
– Distancia a la fuente de GNL
– Posibilidades de cooperación con otros puertos.
– Dimensiones de las zonas de seguridad.
Con información del TT Club
